«Este paseo de medio kilómetro puede parecer mucho, pero no es nada comparado con los viajes que millones de personas tienen que dar al día para conseguir llevar agua que ni siquiera es potable a sus familias. Damos por sentado algo tan básico que es tan necesario para tantas personas. Nosotros podemos abrir un grifo, pero cada vez que lo hacemos se lo cerramos a un tercio de la población del planeta. No somos responsables con el agua, la despilfarramos, contaminamos y no hacemos nada por ello. Podríamos hacer más, reutilizar el agua no potable, energía, ayudar a crear pozos, dejar de dar por garantizado el agua y la salubridad que en otras partes del mundo son utópicas. Este reciclaje, el uso de plásticos abandonados y ya usados, todo esto va más allá del mero agua, la contaminación con plásticos que nos envenena el agua, la necesidad de fuentes de energía renovables, la necesidad de crear comunidades y aprovechar bien los recursos de los que disfrutamos. Para mí, esta obra es una forma de concienciar sobre lo que damos por sentado tantas veces y hacernos recordar, que en cualquier momento podríamos ser nosotros. No demos la tierra y sus recursos por garantizados, señores y señoras.»
«Be Water My Friend»
La acción que he pensado en desarrollar consiste en un paseo por las ramblas, desde la Fuente de Canaletas hasta la parada de metro de Liceu. El objetivo sería llevar un cubo de agua desde la fuente hasta un depósito en la parada de metro, con un camino lleno de puntos clave del objetivo de las Naciones Unidas para leer e informarse, con la colaboración de una ONG como Charity: Water (https://www.charitywater.org/), en la que cada litro llevado representaría una donación económica a la causa por parte de organizaciones colaboradoras. Concienciando y ayudando a la vez de forma efectiva.
Para este paseo se necesitarían carteles hechos con plásticos reciclados y etiquetas que se colocarán en la vía pública con las metas del objetivo de las Naciones Unidas. El contenedor sería de algún desguace o reciclado de otras instalaciones para no contaminar. El agua posteriormente se trasladaría para reutilizarlo de una forma sostenible, evitando hacer la mayor cantidad de viajes posibles. Este camino de medio kilómetro simboliza el camino que millones de personas tienen que realizar a diario para conseguir agua potable. Por no hablar de la falta de medidas higiénicas en muchas partes del mundo que aquí damos por sentado.
Todo el material será reciclable, reutilizable y podrá ser retirado posteriormente, el agua se reutilizará en cultivos, para energía hidroeléctrica, o se devolverá a embalses donde se le dará el uso que debe dársele. Los carteles con la imagen de abajo que haya por el camino de la campaña serán de un material que se disuelva fácilmente con el agua: No contaminando y dando un mensaje más potente a la obra, ya que al ser algo tan efímero, trasladará este mensaje de olvidar los problemas del mundo de forma rápida. Algo que nos pasa a todos.
La forma de proceder será la siguiente: Se colocará un bidón grande al lado de la boca del metro junto a una escultura que se podrá abrir por arriba de un depósito de agua estilo americano. Allí se verterá el agua y por cada litro, se realizará un donativo a una ONG como Charity: Water, habrá personas voluntarias en cada punto del tramo, se buscará animar a la gente y se utilizarán actores también para que las personas vean que pueden colaborar y comprendan una fracción del esfuerzo que muchas personas tienen que hacer cada día para poder llevar agua a sus familiares. En el bidón se podrían hacer dos cosas:
Habrá diferentes carteles con el siguiente mensaje y dibujo, duro, pero algo actual, y os dejo más abajo el PDF con la propuesta entera explicada paso a paso y los lugares para desarrollar la actividad:
Este es un espacio de trabajo personal de un/a estudiante de la Universitat Oberta de Catalunya. Cualquier contenido publicado en este espacio es responsabilidad de su autor/a.